Alquiler de bicis en Roma

Una de las posibilidades de transporte a la hora de conocer Roma es alquilar una bici y salir a pedalear por sus calles, mapa en mano.

La bici es estupenda en primavera u otoño pero personalmente no la veo muy práctica en los días calurosos del verano pues llegas sudado a todas partes.

De todas formas un paseo en bici lo podemos hacer siempre pues hay decenas de agencias de alquiler de bicicletas en las calles romanas y tienes bicicletas simples, de montaña, tándem, para niños y para adultos. Encuentras bicicletas de alta calidad y bicicletas simples y baratas, bien usadas.

Los romanos no son los suizos o los japoneses al volante así que esto de recorrer en dos ruedas la ciudad tiene sus peligros. Cuidado es el principal consejo. Si eres precavido incluso te digo que lo mejor es sumarse un par de horas a alguno de los tours organizados en bici, para saber cómo moverse por el tránsito, y después, sí, lanzarse sólo.

Cuando descubres cómo hacerlo te sientes un romano más capaz de descubrir los secretos ocultos de esta gran y antigua ciudad. ¿Te imaginas andar en bici por la Vía Appia, la milenaria avenida romana? Además de todas las tiendas de alquiler de bici, a lo último te apunto algunas direcciones, la ciudad de Roma opera con un sistema de bikesharing. Es decir, las bicicletas son públicas, están pintadas de color verde y disponibles en muchos sitios.

El alquiler no es caro y en las zonas céntricas puedes pagar con unas tarjetas electrónicas que consigues en las principales estaciones de transporte de la ciudad. Una vez que te registras, como todo registro puede ser un poco pesado, ya tienes tu tarjeta y puedes salir a disfrutar de Roma por 1 euro la hora. La inscripción cuesta 10 y puedes usar la bici por 24 horas.