Ponte Rotto, sobre el Tíber
En Roma hay museos, iglesias, templos, plazas, fuentes y puentes. Entre estos últimos está el Ponte Rotto, un puente que originalmente, allá por el año 193 a.C, tuvo el honor de ser el primer puente de piedra de la ciudad, el primero que pudo soportar el paso de aquellos carros pesados que no podían andar sobre el puente Sublicius que estaba hecho de madera.
Su posición inclinada lo muestra bastante proclive a ser afectado por el agua y por eso mismo la mitad del puente fue destruido en una inundación que tuvo lugar a fines del siglo XVI. Y es precisamente por eso que se lo llama Ponte Rotte o Puente Roto y en general uno lo ve bien desde el punto de vista que brinda el puente Palatino.
Hay que decir que la primera versión de este puente fue de madera también pero pronto parte de esa madera se suplantó por piedra. Alguna vez cruzó útilmente las aguas del río Tiber, conectando el Foro Boario y el barrio de Trastevere. En el primero había una gran zona comercial con mercados y dos templos, el Templo de Fortuna Virile y el Templo de Vesta de forma circular.
Hoy del puente roto solo queda un solitario arco en el medio del río y se considera que los primeros palos del puente se colocaron cuando se construyó la Vía Aurelia a mediados del siglo III a.C. Después vendría la construcción de madera y finalmente en el año 179 a.C a esa madera se sumarían pilares de piedra .
El Puente Roto fue dañado y reconstruido muchas veces y dejó de utilizarse en 1598 cuando por fin su parte este se cayó durante una inundación y fue arrastrada por el río. Nunca se decidió que hacer con el resto, solitario y abandonado en el medio del cause aunque a fines del siglo XIX se demolió la mitad que quedaba y se dejó un único arco en el agua. El que vemos.
Foto 1 vía: Really Rome
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